Hoy es un día con cierta relevancia, por eso he decidido hacer un hueco en la serie de cuestionarios culinarios y meterme por medio. Hoy soy el invitado. Invitado en mi propio txoko, no está mal. Hasta ahora solo se han acercado mujeres (y qué mujeres) a responder a estas veinte preguntas. Todavía hay algunas más en las cocinas, pero a partir de ahora empezará a haber más hombres respondiendo. Bueno, me defino en el lateral del blog como «es periodista y amante de la comida, la cocina y la gastronomía. Este blog es el reflejo de esas inquietudes y aficiones. También escribo en mi blog.».
- ¿Cuál es tu especialidad en la cocina?
Ninguna. No creo que sea especialmente hábil en ninguna de las ramas. La repostería nunca la toco, por lo que sé que no es mi especialidad. Del resto, suelo tocar varios palos, pero tampoco mucho.
- ¿Cuál es tu plato estrella?
El que más suelo hacer (y más gusta) es el pollo estilo Kentucky. Es una receta que encontré por Internet y queda muy bien. El pollo queda muy bien y eso que aquí en Euskadi ese ave es demasiado seca y algo insípida. Por otra parte, uno de los que más me gusta hacer es el pollo al curry, con la salsa bien espesa.
- ¿Sin qué herramienta culinaria no podríais vivir?
Aquí copio a María Bernal y digo que los fogones de gas. Me gustan mucho más que las chapas o la vitrocerámica. Que se vea el fuego.
- ¿Qué herramienta querrías utilizar?
Me pasé toda la emisión de ‘Top-Chef’ imaginando locuras con el nitrógeno líquido. Así que una de las herramientas sería esa y otra el sifón para sacar texturas y demás.
- ¿Sigues la receta al pie de la letra o improvisas sobre la marcha?
Suelo ser muy correcto e interpreto poco la receta. No me gusta salirme de los límites hasta controlar bien la receta. Una vez asimilada, experimento y hago ensayo y error. Si improviso es más en la cantidad de ingredientes que en la sustitución de los mismos.
- Confiesa algo que hayas hecho fatal entre los fogones.
Un pollo al curry que me salió de pena. Se me formaron muchos grumos con la harina y era todo pastoso y pelín asquerosito. No se podía ni comer. ¡Puag!
- ¿Comida favorita?
Va variando dependiendo del momento y el lugar. Pero te podría decir que la sopa. Y si es de arroz, mejor.
- ¿Cuál es el plato favorito de los que hace tu madre?
Son varios. Mi madre borda el pil pil y la vizcaína. Hace unos tigres a la vizcaína que son para morirse. La tortilla de patatas también le queda genial, pero tiene más cogido el callo a los fogones del bar. Creo que me quedo con dos: el guisado de arroz (siempre le queda espectacular) y el marmitako. El año pasado hizo uno fuera de concurso durante las fiestas y le dijeron que era de premio. A nosotros nos encanta.
- ¿Carne o pescado?
Carne, sin dudarlo. A ser posible de ternera, aunque el pollo, el pavo y el cerdo también me gustan mucho. Con los pescados soy algo más especial, pero con un buen bonito,que se quite un rancio filete, también te lo digo.
- ¿Pasta o arroz?
Arroz. Ya he dicho que el guisado de arroz de mi madre es espectacular, aunque a ella (y a mi) le encanta el arroz negro con alioli del Burdinola. También es un poco pecaminoso.
- El postre, ¿dulce o salado?
Normalmente dulce, pero no le hago ascos a un postre salado.
- ¿Cuál es tu postre preferido?
La tarta de queso. No soy muy chocolatero, así que si no hay este tipo de tarta en el menú o alguna similar, prefiero un buen heladito. El pastel de arroz o el vasco también me chiflan.
- ¿Qué plato no volverías a probar?
Las sopas de algas. Son pelín insípidas. Tampoco tengo demasiados platos que diga «no como eso ni loco». No soy muy amigo de la patata cocida o guisada, por lo que trato de evitar los platos que tengan como elemento principal ese ingrediente. Excepto el marmitako, claro.
- ¿Qué plato quieres probar antes de morir?
Seguramente un buen filete de kobe. Pero no de esas hamburguesas que se han puesto de moda que la carne te la traen congelada, no. Un filete casi recién sacado de la vaca. Si para ello tengo que viajar a Kobe, pues habrá que ir.
- ¿Cuál ha sido tu último restaurante?
El Basalbo. Como el blog es mío, podéis leer la reseña del otro día.
- ¿A qué restaurante no volverías nunca?
Al MAD Café de Madrid. Fui el año pasado con la esperanza de comer una buena hamburguesa y me decepcionó mucho. He comido cosas mejores y más baratas en Euskadi. Sigo sin entender cómo está esa burger en los rankings de mejores hamburguesas de Madrid.
- ¿A qué restaurante tienes unas ganas tremendas de ir?
A alguno de Chicote por hacer una imitación suya y la broma. Quiero ir al Azurmendi, de Eneko Atza, un tres estrellas Michelín con un menú prêt-à-porter por 35€ y al Ur-Gatza, de Igor Agirre (compañero de Atza), que he estado en las cocinas, pero no he degustado ninguno de sus platos.
- ¿Cocina de vanguardia o repostería creativa?
Cocina de vanguardia. Me incomodan los cupcakes con tantas florituras. Abrieron un local de ese tipo de repostería en el pueblo y todavía no he entrado. A ver si un día de estos…
- ¿Cuál es tu hamburguesa favorita?
Creo que muchos ya sabéis la respuesta. Barro para casa, eso sí. Mi favorita es la Berlín del Alvarito’s Bar, aunque suelo recomendar bastante la Americana porque es la más completa. Y, quieras que no, tiene mérito que me sigan gustando con la cantidad de burgers que he hecho y servido aquí. Aunque creo que me he comido más.
- Imagina una receta loca y descabellada. Un plato troll.
En este caso tiraría más por la deconstrucción (y destrucción) de un plato típico que por una guarrindongada. Quizás una mousse de paella (hacer una paella, pasarla entera por la batidora y luego al sifón para que coja textura de mousse) con petazetas para darle un toque de mascletá al asunto.