La verdad, si me preguntáis dónde comer un buen menú del día y barato en Algorta, no sabría deciros. Casi que os mandaría al Basalbo Baserri, que merece muy mucho la pena o al Karola Etxea del Puerto Viejo. Los platos del día (tan de moda últimamente) del Burdinola o el Saniko no están mal. Pero me cuesta decidir. Hace no mucho abrieron un nuevo bar-restaurante que tiene menú del día. Como estaba toda la familia en casa, decidimos ir a probarlo, a ver qué tal. ¿El resultado? Satisfactorio y correcto, pero nada más.
La Taberna Unai se encuentra en la plaza que hay entre la Avenida Basagoiti y la calle Juan Bautista Zabala en Algorta. Un local amplio que ha sido reformado y han aprovechado para poner un restaurante. También es bar, pero puedes comer el menú del día. Así que allá nos fuimos, todos en tropel. Al llegar, nos cantaron los platos. No los recuerdo bien, porque la visita fue hace dos meses. Yo me decidí por un revuelto de morcilla que estaba rico. Iba acompañado de un par de tostas. Como digo, estaba bueno, pero es un plato sencillo.
De segundo, me decidí por el pollo. No soy muy fan de la carne de pollo, porque en Euskadi es una ave que queda muy seca. He probado en otros lugares de España como en Adeje (Tenerife) y lo hacen muy bien y sabroso. Da igual cómo lo intente preparar, siempre se me hace una argamasa en la garganta. En este caso, no era una excepción. Si bien estaba bueno y las patatas parecían de buena marca. No estaban mal. Aunque me encantan las patatas fritas… En general, rico, pero tampoco era nada del otro mundo.
Para el postre, la tarta de queso. Ya sabéis que adoro la tarta de queso y me encanta probarla a ver qué tal. No sé quién dijo que el nivel de un restaurante se puede medir con este postre. En este caso, me llevé una decepción. No porque no estuviese rica, que lo estaba, fue por el acompañamiento. La tarta iba con un poco de natillas en un lado y caramelo por encima. No soy un gran fan del caramelo y me incomodó bastante la presentación. Además, que no me avisaron que llevaba caramelo, porque lo hubiera pedido sin él. ¡Es el vinagre balsámico de los postres! El café estaba bueno, pero también tienen un bar, así que harán muchos a lo largo del día.
Como ya he indicado arriba, el sitio no está mal, pero es correcto. No sé si volvería a una comida. El menú, satisfactorio y correcto, son 12’50€. A mi parecer algo elevado para lo que ofrecen. No deja de ser un menú del día en un bar (nuevo) de barrio. Espero que les vaya bien, ya me pasaré a tomar alguna caña de esas que tienen de barrica.
