Hace ya varios meses que La Brasa Canalla abrió sus puertas en la calle Elcano de Bilbao, justo en frente de esa pequeña facultad de la UPV en esa parte de la ciudad. A la inauguraron fuimos unos cuantos gastrobloggers a conocer el local y disfrutar un poco de lo que podía dar de sí. Después de esa primera toma de contacto nos hemos ido acercando progresivamente. Por ejemplo Blackie o Alma Botxera. Ahora viene el Txoko a coger el relevo.
La oferta de La Brasa Canalla no se sustenta solo en hamburguesas, también tiene ensaladas, acompañamientos o batidos. Incluso tienen una guarrada del mes que cuando fui consistía en una hamburguesa con donut en vez de pan. Ni decir que no la probé. Curioso me pareció la oferta del batido: plátano, aguacate y leche. Como para probar en casa alguna vez. Dicho esto, hay que reconocer que la auténtica estrella de la carta re la hamburguesa con pulled pork. Por si no lo sabéis, se trata de una hamburguesa hecha con carne de cerdo cocinado con humo a baja temperatura. Así, consiguen que la carne se ablande y se quede como con hilos. Seguro que la habéis visto iil veces en series, pelis o programas americanos, en ‘Crónicas Carnívoras’ sale bastante.
Así que ahí fui, a probar esa maravillosa carne que ya había probado el día de la inauguración y en el segundo aniversario del Goiko Grill. Tengo que decir que, como le pasa a @jabibilbao, cuando no hay hamburguesas preestablecidas en la carta se me va un poco la cabeza. Prefiero pedir una Berlín o una Canyonero que montármela a mi gusto. Tanta libertad de elección provoca que no sepa muy bien qué ponerle. Prefiero que un señor o una señora que sabe más que yo me dé varias opciones de lo que, en su opinión, es lo mejor.
Aún así, acabe por pedir una hamburguesa con pulled pork, lechuga, tomate, cebolla morada de Zalla y creo que bacon, aunque no lo recuerdo demasiado y en las fotos no se aprecia. Es lo que tiene escribir un post de comida varios meses después y no haber apuntado todo. Mi memoria es buena, pero no da para tanto. Los dos puntos negativos que se lleva la burger y que me va a hace volver para ver si fue casualidad o política de empresa tiene que ver con el pan: por un lado estaba frío y por otro un poco seco. Aunque la pedí con alioli casero (Yoda bendiga ese invento), ésta se pone en la base, entre la lechuga y el pan. Ésto provoca que la hamburguesa de la impresión de estar seca, aunque vaya lubricada, por eso prefiero que la tapa venga impregnada en salsa. Por otro lado, el pan tipo brioche que escogí estaba frío. No me gusta esa sensación. A este respecto, una carta cerrada podría haberme ayudado al elegir el pan, por ejemplo. No sé si hice bien en mezclar el brioche con el pulled pork.
Con esto no quiero decir que estén malas. Todo lo contrario. Aunque son defectos que no hacen de mi experiencia todo lo satisfactoria que podría llegar a ser. Igual es que soy muy tiquismiquis. Las patatas con si toque de sal y pimienta estaban ricas, ja que nada especial que destacar. El postre, un brownie de chocolate era de calidad. Soy pelín escrupuloso con las nueces, pero. O por ello voy a decir que estaba malo. Me gustó, la verdad.
En definitiva, aunque no fue una experiencia totalmente satisfactoria, tengo que reconocer que se tratan de las mejores hamburguesas que he comido en Bilbao en los últimos tiempos. Como digo, tengoque volver a conocer como han evolucionado en este tiempo y ver si los fallos que encontré son algo concreto o se prolongan en el tiempo. Son una nueva hamburguesría, puesta en marcha por unos chicos jóvenes y siempre tienen tiempo de mejorar y evolucionar. Si todo va desde bien hasta mejor, bienvenido sea. Yo por lo pronto volveré, a ver si me acaban de convencer del todo.
No te molestes,no es que no hayan mejorado,yo diria que han empeorado y mucho