Esta semana he estado dando vueltas por Madrid y he estado a tope. Por suerte, todavía guardo unos cuantos cuestionarios pendientes que iré colgando. Lo que no van a faltar van a ser locales chachis que he probado en la capital… Hoy visita el Txoko una experta en comunicación, publicidad, turismo y, sobre todo, comida. Ella es Amanda Muñiz que dice de ella en su bio «#publicidad #turismo #música #diseño #fotografía #arte #idiomas… An error occurred while loading this user’s bio. Pls, click the FOLLOW button for assistance».
- ¿Cuál es tu especialidad en la cocina?
Ermm… Confieso que la cocina no es lo mío. Tengo un poco más de gracia en la repostería. Pierdo la paciencia si he de seguir los pasos al pie de la letra, me gusta innovar y arriesgo con sabores (a veces, DEMASIADO). Supongo que con los postres hay más posibilidad de desarrollo creativo, aunque sólo sea por la decoración.
- ¿Cuál es tu plato estrella?
El sándwich caliente de jamón y queso. Extiendo las láminas por todo el pan, sin dejar que los bordes queden vacíos, pero consigo que el queso no rebose por los lados. Me salen de ricos… Jajaja. No! Es coña! Soy capaz de hacer platos UN PELÍN más elaborados. El huevo revuelto con un chorritín de leche, salsa de soja, sal, pimienta y cebollino picado es mi especialidad. La quiche verduras me sale muy rica. Las ensaladas también son mi punto fuerte. Aprovecho cualquier resto que pille en la nevera (pollo, pasta, arroz…) y añado fruta, mucha fruta: naranja, granada, fresas, frutos secos, manzana… Las he probado todas y todas gustan. Y ahora con los diferentes vinagres balsámicos… Buaaaaá… ¡Cada día, un sabor nuevo! Ahhh, no olvidemos mis popcakes y cupcakes, decorados con masa de azúcar, no con frosting. La manga pastelera y yo no nos llevamos muy bien todavía (y mira que lo intento).
- ¿Sin qué herramienta culinaria no podríais vivir?
El pelador, jaja. Ya me he acostumbrado a mondar la piel con él y el manejo del cuchillo se me da un poco mal en estos casos (voy muy lenta).
- ¿Qué herramienta querrías utilizar?
Últimamente me estoy comprando un montón de cachivaches y moldes para repostería, y aún me queda bastante para terminar mi colección deseada, pero eso no cuenta, ¿verdad? Quiero un recoge-migas, pero no una pala, sino algo más sofisticado: un sistema rotativo mediante el giro rápido y simultáneo de tres cepillos (lo acabo de ver en Google y de verdad que lo quiero).
- ¿Sigues la receta al pie de la letra o improvisas sobre la marcha?
Hasta la mitad de la receta sigo medidas y tiempos al pie de la letra. Después, me pierdo entre ideas, rebusco en armarios y añado sin pensar según me voy encontrando ingredientes. A veces triunfo, otras no. Suele ocurrir que los demás no quieren probarlo. Eso sí, aunque no me guste, me lo como y pongo cara de “qué rico está, vosotros os lo perdéis”.
- Confiesa algo que hayas hecho fatal entre los fogones.
Ejem. ¿Seguro que quieres saberlo? ¿No te doy miedo? Una vez quise hacer unas flores guiándome más por la vista que por el gusto. Mezclé harina, un huevo, azúcar y leche (y como no espesaba, más harina) y cree una especie de croquetas redondas. A la sartén que fueron hasta ponerse doraditas (aunque claro, por dentro estaban crudas, crudísimas). Eso serían las partes centrales de las flores, pero quedaban los pétalos y los tallos. Tan sólo tenía que poner las bolas en el centro del plato y decorar a base de pinceladas con las pastas de colores que te comento a continuación. Para los pétalos: karkadé (una especie de té egipcio de color fucsia que tenía por casa) mezclado con leche condensada. Quedó una pasta brillante, preciosa, pero los polvitos tras haber machado la planta, no quedaron como esperaba. Para el tallo: (SPOILER!) no mezcles nunca cacao en polvo con miel, en serio, se cuartea y sabe asqueroso. Aunque terminé mi obra maestra y de aspecto quedó bonito, no había un ser en toda la Tierra que se comiera aquello.
- ¿Comida favorita?
Ufff… Difícil. ¿El sushi? ¿el pad-thai? ¿el cocido madrileño? Te vas a reir, pero la sopa de sobre me vuelve loca. Y el huevo hilado. Y los chopitos, las gambas al ajillo y el salmón ahumado. Y el queso provolone a la plancha. […] Sería más fácil contestar “qué no me gusta”. Ahí te diría que el huevo frito.
- ¿Cuál es el plato favorito de los que hace tu madre?
¡Mi madre cocina MUY bien TODO! Yo diría que la empanada gallega de carne, siguiendo la receta orensana; ella hace la masa del pan, y no añade tomate frito, que según me explicó, era la manera en que los agricultores conservaban este plato durante las jornadas más calurosas en el campo. La carne rellena es otra de sus especialidades, junto con los canelones para los que crea una especie de paté a base de distintas carnes. Y los postres, ay, los postres… Su mousse de melocotón (suave y dulce en su justa medida) es mi favorito.
- ¿Carne o pescado?
Carnívora hasta las trancas. Estoy salivando al pensar en un buen chuletón de buey a la brasa, al punto, con escamas de sal por encima, acompañado de pimientos del piquillo (ay, ay, ay). Pero vamos, que tampoco hago ascos a un carpaccio de ternera, ¿eh? El pescado me gusta al horno, más que frito o en salsa. Me quedo con la lubina.
- ¿Pasta o arroz?
¡Pasta! Me gusta toda: al pesto, con tomate y cebollita picada, cruda con un chorrito de aceite y mucho orégano… Macarrones, ravioli, tortellini, lazos, cinta… ¡Da igual! He llegado a hacer experimentos dulces con ella, dado que es prácticamente insípida, y han sido todo un acierto, he de decir.
- El postre, ¿dulce o salado?
Es que hay postres salados?? Dulce siempre. Soy extremadamente golosa.
- ¿Cuál es tu postre preferido?
El coco con crema de queso (receta cubana) que probé en un local madrileño me cautivó; y desde entonces, me hago el mejunje en casa siempre que puedo. También adoro el helado de frutos secos que sirven en algunos restaurantes indios de la ciudad.
- ¿Qué plato no volverías a probar?
Las criadillas de cordero. ¿Por qué? Según cuenta mi madre, me las comía a puñados cuando era pequeña (eso y los sesitos, ¡PUAG!). Por lo visto, me decían claramente que eran los huevos del cordero, pero idiota de mí, que pensaba que estos animales eran ovíparos.
- ¿Qué plato quieres probar antes de morir?
Te contesto sin dudarlo: BALUT!!! El año pasado estuve tentada en una feria culinaria filipina, pero me rajé. Luego me arrepentí. Tengo familia viviendo por allá y planeo hacer una visita en breve; así que me excuso con la idea de probar las cosas aquí (donde te explican qué es exactamente) para más tarde ir a tiro hecho, casi, casi con los ojos cerrados.
- ¿Cuál ha sido tu último restaurante?
Como puedes deducir, siento especial predilección por la cocina internacional. El exotismo, los sabores inusuales y el simple hecho de sentirme toda una valiente por probar algo que los demás no querrían ver ni en pintura son el motor de todo ello. Mi última visita a un restaurante fue al etíope Nuria, al que ya he ido en varias ocasiones. Muy recomendable. Sabrosa, colorida… Ah, ¡y se come con las manos!
- ¿A qué restaurante no volverías nunca?
Creo que se llamaba El Inti de Oro, un peruano. El trato fue correcto y el local era espacioso y limpio, pero la comida no me gustó nada. Conocía otro peruano en Madrid y recordaba esta cocina con un sabor agradable, muy casera. Me acuerdo que pedí un arroz con pollo (el plato más típico) y que aquello sabía a nada más que a cilantro. El pollo era hervido, de esos que te dan cuando estás enfermo, y el arroz era blanco, tal cual. Me quedé con mucho hambre ese día; aunque el postre (mazamorra morada) sí estaba bueno.
- ¿A qué restaurante tienes unas ganas tremendas de ir?
Al Jack Rabbit Slims, que sale en Pulp Fiction. ¡No sé porqué no han abierto ya uno así! Mnmnmn… Quiero volver a Kimbumbu (un africano en la zona de Chueca). Me gustó mucho y no fui arriesgada en aquella ocasión. Así que toca volver y pedir el plato más raro que tengan. Si hablamos de uno al que no haya ido nunca… Espera que consulte mi Foursquare. Ah sí, La Granja, especializado en carnes exóticas como camello, reno, bisonte, gacela y avestruz, por citar algunas. ¡Con un par!
- ¿Cocina de vanguardia o repostería creativa?
Cierto es que tengo curiosidad por probar algo de la llamada “cocina de los sentidos”. Lo de las deconstrucciones no me hace mucha gracia, pero estaría bien que mis papilas gustativas experimentasen la sensación del nitrógeno líquido, las gelatinas calientes, las espumas y los aires. Me declaro fan de los trampantojos culinarios, ahora que están tan de moda. Eso de creer que vas a comer algo reconocible y que te sorprendas con el sabor tiene que ser fascinante. Sin embargo, creo que mi amor por el dulce y la creatividad en un amplio sentido de la palabra, pueden conmigo. Aparte, que tengo buen saque aunque no lo parezca, y no estoy dispuesta a pagar taitantos euros sin saciarme siquiera. ¡Me quedo con la repostería creativa!
- ¿Cuál es tu hamburguesa favorita?
Me quedo con dos: La Alfredo’s burger con queso, bacon y salsa barbacoa en Alfredo’s Barbacoa. Y La Cabrita de Home Burger Bar: carne ecológica con queso de cabra, salsa de arándanos y mezcla de lechugas.
- Imagina una receta loca y descabellada. Un plato troll.
Va a ser difícil superar en trolleo a recetas ya consolidadas como las anchoas con leche condensada, el foie con mermelada de tomate o el chorizo con chocolate (doy fe de que están todas buenas), pero intentaré crear un plato que no resulte incomible pese a todo. Mnmnm… Pechugas de pecho troceadas, en una salsa reducida de Blue Tropic (podemos macerar las pechugas la noche antes para que adquieran un color azul más intenso) a la que hemos añadido trocitos de plátano (plátano macho para paladares menos golosos), pistachos troceados, arroz blanco y una mezcla de especias: canela, pimienta molida, comino, nuez moscada y jengibre. La idea es que quede una especie de arroz meloso, ligeramente dulce.