Sigo con el tema de los pintxos de Santutxu. Siento la saturación, pero el certamen ha arrancado su semana final y la idea me parece tan buena y tan bien realizada que es necesario dar la chapa para que vayáis. Como ya me he hartado de repetir, esta edición he vuelto a ser jurado. Por partida triple (aunque la tercera fue cortita). El pasado miércoles me acerqué, otra vez, hasta el barrio bilbaíno para probar cuatro pintxos de concurso que no pudieron catar los jueces de sus zonas porque estaban cerrados. Así que ahí fui a ejercer como jurado y valorar las distintas propuestas de los bares del barrio.
Fueron cuatro pintxos, aunque luego me comí dos más por vicio y probar algunos participantes que tenía ganas. No todo va a ser juzgar y comer gratis. Así que hicimos un batiburrillo de zonas y pasamos de la B a la D. Luego por vicio me fui a acabar mi zona C (me robaron un pintxo los otros jueces) y acabé en la A. Me faltó la E para completar un viaje interzonal, pero eso lo dejo para otro día. La casualidad hizo que repitiese voto en dos bares de la edición anterior y creo que han subido algo el nivel, si bien uno me gustó más el año pasado, si estaba más elaborado. Sin más dilación, os dejo con los seis pintxos que probé en este segundo día en Santutxu Pintxotan.
Ay el vicio xP El 35 es el que más me gusta visualmente. Tendría que probarlo 🙂
Los hay muy buenos, Gilda. Hay gildas, de hecho.