Mallorca en mi cocina

Al pensar en platos típicos de Mallorca, la cabeza se va, inevitablemente, a la sobrasada. Y no es para menos, se trata de uno de los productos mallorquines por excelencia, junto con la ensaimada. En casa tengo la suerte de tener un montón de productos mallorquines de la casa Munar que nos trae mi hermana. Normalmente son un gran regalo de Andreu Manresa (@AndreuManresa) que siempre degustamos y disfrutamos. Mi hermana vino hace unas pocas semanas y trajo la maleta cargada de productos que os quiero enseñar.

Como ya os he dicho, el rey es la sobrasada. Hasta tres tipos llegaron en la última remesa. Una tipo poltrú, una payesa dulce (supongo, todavía no la hemos probado) y una sobrasada blanca de la que ya hemos dado buena cuenta. Además, nos trajo un camaiot, un embutido muy típicode la isla hecha con la carne magra del cerdo. De hecho, mi hermana dice que el único pamboli que suele comer es el que lleva este producto. Nos trajo dos tipos, aunque el que se ve en la imagen es el tradicional, cosido a mano antes de introducirlo en la cazuela.

Junto a todo ello, trajo tres latas de paté. El paté también es de Munar y tenemos de dos tipos: artesano y el clásico. El artesano sigue la misma receta que utilizaban en 1942, cuando se fundó la casa. El clásico destaca por ser el más suave de toda la gama (todavía hay uno picante y otro tradicional) y un bajo contenido en hígado. Buenas noticias para los celiacos porque no contienen gluten y el tradicional, además, no tiene lactosa. Así que se trata de un paté rico y que puede disfrutar toda la familia.

Para terminar, otro producto típicamente balear son las quelitas. Esas galletas saladas hechas de la manera tradicional forman parte de la dieta habitual en las islas. Son geniales para untar el paté o la sobrasada. Este paquete que se muestra es más tradicional, pero la marca Quely tiene una interesante variedad de ellas, como las de curry o las de queso (mis favoritas).

Para terminar, quiero daros un par de consejos a la hora de consumir sobrasada. Ya hice, en su día, un arroz con sobrasada que estaba bien rico. También encontré un delicioso panini de sobrasada, queso y huevo de codorniz en Directo al Paladar. Recetas hay miles, es cuestión de ir probando. Incluso en la web de Munar puedes encontrar diferentes usos a la sobrasada y el paté. Como digo, uno de los consejos es pasar ligeramente la sobrasada por la sartén antes de consumirla. El golpe de calor es lo necesario para que suelte un poco de grasa y al untar en el pan esté mucho más bueno. El otro es que la mezcléis con dulce. Una de las combinaciones más típicas y tradicionales es con miel, aunque en la web recomiendan hacerlo con algo de azúcar en las más curadas. También leo que las empanadillas de sobrasada con miel son una delicia. El caso es probar a ver.

Yo por mi parte voy a seguir disfrutando de los embutidos mallorquines y preparando, de una vez por todas, mi desembarco en la isla. A ver si en 2015… Bueno, consumid sobrasada y jugad con ella, se deja hacer muchas cosas. Carnes, pastas, frutas, incluso solas… ¡Bravo por la sobrasada mallorquina!